La caída de los precios petroleros pone en jaque la política subsidiaria del gobierno y las importaciones de productos básicos, lo que vaticina momentos futuros difíciles para lo que queda de año y en el 2015.

Salvatore Lo Mónaco- El precio del crudo venezolano caerá en la medida que lo hagan otras ofertas petroleras en el mercado internacional, especialmente el West Texas Intermediate (WIT), indicador que mide los precios internacionales del crudo que se produce fundamentalmente en Texas y en el sur de Oklahoma,  que cayó por primera vez por debajo de los 80 dólares el barril, debido a mayores ofertas en el mercado internacional de los países OPEP y no OPEP y el débil crecimiento de la demanda global (China desaceleró su economía a niveles de hace 5 años).

El WTI llegó a un mínimo de 79,78 dólares el barril, cuota que no bajaba a ese nivel desde el 29 de junio del año 2012 y se está negociando a futuro en 80.62 dólares el barril, contratos que cerraron el día de ayer en los mercados internacionales.

Se observa un desplome de 18% en los precios del crudo en Estados Unidos, desde el máximo de 107.73 dólares por barril alcanzado en junio de este año. Por su parte,  los contratos del crudo Brent (marcador del crudo producido en el mar del Norte y que fija el índice en Europa y algunos países del Medio Oriente)  cayeron  85 centavos o 1.01 dólares, para cotizarse en 82.93 dólares por barril, en la bolsa de Londres. El contrato se ubicó en su nivel más bajo desde noviembre de 2010, mes en que se situó en 82.60 dólares.

Desde el 6 hasta el 10 de octubre de este año, la cesta venezolana estaba en 82,72 dólares el barril, la cotización de la Opep se ubicaba en 89.34, el WTI en 88,40 y el Brent en 91,73 dólares el barril. Sin embargo se observa una mayor caída de los precios para esta semana, el WTI cayó 1.5% (1.23 dólares) y la cesta Opep se ubico alrededor de 81,89 dólares el barril, y según expertos en la materia, seguirán cayendo los precios, a pesar de la llegada del invierno en altos países consumidores de energía. Esta caída favorecerá la mayor producción industrial mundial, al tener menores costos por el lado de la energía, que es un componente fundamental para las empresas manufactureras y las eléctricas. Sin embargo, impactará a aquellos países cuya renta mayor (o total) se basa en la venta de crudo, como es el caso de Venezuela.

Aunque la Asamblea Nacional aprobó un presupuesto “conservador” para este año basado en 60 dólares el barril, la verdad es que ha ejecutado, fuera presupuesto, más de lo planificado, a sabiendas que los ingresos casi duplicaban las estimaciones de ingresos,  otorgando recursos por encima de ese nivel a entidades como el Bandes y otros organismos, que desbordan claramente el músculo en divisas que tiene actualmente el Estado, al caer el precio petrolero y obligando al BCV a emitir billetes sin respaldo.

Para este momento, según el Plan de Pdvsa del año 1996, Venezuela debería estar produciendo 6 millones de barriles diarios, sin embargo, según datos de la Opep y de la AIE, la actual producción de la petrolera estatal venezolana se encuentra en 2.5 millones de barriles diarios, de los cuales alrededor de 400.000 se dirigen a los acuerdos de PetroCaribe y otros 700.000 para el consumo interno, con gasolina subsidiada, que ni siquiera cubre los costos de producción.

Esa situación es la que realmente está imperando por el lado del ingreso de divisas. Hoy,  el Presidente de Conindustria  dijo que Venezuela adeuda 10.000 millones de dólares a los proveedores de bienes de capital, partes y piezas. Si a ello le sumamos los reclamos de los comerciantes, de las ensambladoras, de las farmacéuticas, de las aerolíneas, las importadoras de alimentos y otros productos, podríamos llegar a una cifra cercana a los 35.000 millones de dólares. Esto, sin sumarle los reclamos que están en el CIADI, por expropiaciones (o incautaciones), que en términos de demanda suman otros 40.000 millones de dólares.

El Presidente Nicolás Maduro dijo hoy, en cadena nacional, que Venezuela tiene “triple corona”, que está en la Comisión de Derechos humanos de la ONU, hoy en el Consejo de Seguridad y próximamente en la Presidencia de los Países No Alineados (MPNA).

Lo cierto del asunto es que, no obstante los triunfos políticos en el marco internacional, la situación económica de Venezuela se deteriora y en lo sucesivo habrá mayor escasez de productos, debido a la caída del ingreso petrolero y mayor inflación, si el BCV sigue fabricando bolívares sin respaldo y si no se llega a un consenso nacional que asegure el futuro económico del país.

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